¿Qué es un facial?
Un facial es un tratamiento de bienestar muy solicitado que busca limpiar, exfoliar e hidratar tu piel. Dependiendo de dónde te realices este tratamiento, puede variar desde nutrir tu piel y ofrecerte un momento de relajación hasta enfocarse en mejorar aspectos específicos como manchas oscuras o una textura desigual con el uso de técnicas como agujas, láseres y químicos.
Pero no te asustes, estos procedimientos son bastante suaves y generalmente no requieren tiempo de recuperación. Así que podrías hacerte un facial en la mañana y salir con tus amigos a comer o cenar sin problema.
¿Cuál es el mejor tratamiento facial para ti?
El mejor facial para ti dependerá de tu tipo de piel y lo que estés buscando mejorar. Sea que necesites hidratación, iluminación o un tratamiento antienvejecimiento, hay un facial perfecto para cada necesidad. Si te sientes abrumado con tantas opciones, no dudes en consultar a un profesional que te oriente.
8 tipos de faciales y sus beneficios
Para que conozcas más sobre tus opciones, a continuación, te presentamos ocho tipos de faciales populares en México, que no sólo te ayudarán a lucir una piel radiante, sino que también te permitirán disfrutar de un momento único de cuidado personal.
1. Facial clásico
Este es el tratamiento ideal para quienes buscan una opción completa, ya que se enfoca en las necesidades generales de la piel. Incluye limpieza, exfoliación, extracción de puntos negros, masaje e hidratación, y utiliza productos específicos para tu tipo de piel. Es perfecto si estás iniciando en el mundo de los faciales y buscas una opción económica pero efectiva.
2. Facial de microneedling
Ideal para mejorar la textura de tu piel, especialmente si tienes cicatrices de acné, estrías o arrugas. Este tratamiento utiliza pequeñas agujas para revitalizar tu piel. Aunque puede sonar un poco intimidante, es un procedimiento seguro que promete grandes resultados.
3. Facial con terapia de luz LED
Una excelente opción si te preocupa la opacidad de tu piel. La terapia LED utiliza diferentes tipos de luz para revitalizar tu piel. Recuerda siempre aplicarte protector solar después, ya que tu piel estará más sensible al sol.
4. Rejuvenecimiento facial con láser IPL
Este tratamiento utiliza luz pulsada intensa para mejorar el tono y la textura de tu piel, así como para reducir líneas finas y daños por el sol. Es importante consultar a un profesional experimentado, sobre todo si tienes un tono de piel más oscuro.
5. Microdermoabrasión facial
Un procedimiento que renueva la textura y apariencia de tu piel al eliminar las células muertas. Es importante que este tratamiento sea realizado por profesionales para evitar daños y disfrutar plenamente de sus beneficios.
6. Facial de dermaplaning
Si el vello facial fino te incomoda, este tratamiento es para ti. Deja tu piel más suave y luminosa, mejorando además la aplicación de maquillaje. No es recomendable para todos los tipos de piel, así que es mejor consultar antes de probarlo.
7. Peeling químico facial
Utiliza químicos para renovar la apariencia de tu piel, dejándola más brillante y uniforme. Hay diferentes intensidades, por lo que puedes elegir la que mejor se ajuste a tus necesidades.
8. Facial hidratante
Si sientes que tu piel necesita un extra de hidratación, este tratamiento es la solución. Proporciona una hidratación profunda dejando tu piel suave y luminosa.
Beneficios de los faciales
Los faciales no solo son un momento de relajación, sino que ofrecen múltiples beneficios para tu piel y su cuidado, como una limpieza profunda, exfoliación, hidratación y mejora en la textura y el tono de tu piel. Son una excelente manera de consentirte y cuidarte.
¿Con qué frecuencia deberías hacerte un facial?
Esto dependerá del tipo de facial y de las necesidades de tu piel. Algunos tratamientos requieren sesiones regulares para obtener los mejores resultados, mientras que otros pueden realizarse con más frecuencia. Lo mejor es consultar a un profesional que pueda guiarte.
¿Cuándo es el mejor momento para hacerte un facial?
Incluye faciales en tu rutina de autocuidado cuando sientas que tu piel necesita un cuidado extra o para prevenir problemas futuros. No hay un momento específico, pero es una excelente opción para mantener tu piel saludable y radiante.
Recuerda, cuidar de tu piel es una forma de consentirte y dedicarte tiempo a ti misma. Los faciales no solo mejoran la apariencia de tu piel, sino que también ofrecen un momento de relajación y bienestar.