Una de las formas más fáciles para cambiar de look es optar por un nuevo color de cabello, sin embargo, el tono elegido no siempre es el adecuado para la imagen. Es muy importante tomar en cuenta que la coloración se debe adaptar a la personalidad, al tono de piel y hasta a la edad de cada mujer.
Aunque el color del cabello no tienen que estar directamente relacionado con la edad, siempre se debe pensar en ese detalle, porque un tono inadecuado puede dar un aspecto más demacrado y uno correcto puede producir el efecto contrario.
CABELLO COLOR RUBIO A LOS VEINTE AÑOS DE EDAD
Entre los veinte y treinta años todo está permitido. Las mujeres más jóvenes se ven hermosas con colores suaves, pero pueden arriesgarse con cualquier tono sin miedo.
El truco está en mantener las hebras lo más naturales posible. La elección de los tonos de reflejos de un color rubio medio puede variar entre oro y caramelo. Mientras que un rubio más claro o platinado también es una buena opción, siempre y cuando no se vea vulgar, ni muy pesado.
CABELLO RUBIO A LOS TREINTA AÑOS DE EDAD
Generalmente en el día a día estamos a las carreras, por lo que es esencial elegir un color que nos brinde un aspecto juvenil y que no requiera mucho tiempo su adopción y manutención.
Para las mujeres de entre treinta y cuarenta años los reflejos en tonos rubio ceniza o dorado son una buena opción, pues requieren menos retoques.
CABELLO RUBIO A LOS CUARENTA AÑOS DE EDAD
Lucir un tono rubio parejo en el cabello tiende a envejecer la apariencia. Las rubias suelen usar matices, hebras dos tonos por encima del natural, lo que da profundidad al color.
A partir de los cuarenta años de edad menos es más. Para obtener un resultado natural con reflejos alrededor del rostro y disimular el cabello gris, unas luces en diversos tonos de rubio claro, como champagne o platinado, son ideales.
CABELLO RUBIO A LOS CINCUENTA AÑOS DE EDAD
Después de los cincuenta años de edad, las canas son cada vez más frecuentes, por lo que los reflejos ya no son suficientes para camuflarlas. Es por ello que en ese momento es necesario darle color al cabello desde la raíz, pero sin renunciar a los reflejos poniendo especial atención en ellos.
Las mujeres mayores tienen el cabello más frágil, si la decoloración te reseca, el problema será más grave. Por eso debes invertir en más cuidados, como hidrataciones frecuentes.